Esta embarcación, perteneciente al tipo de los acorazados, es una de esas que ha mercado tendencia a lo largo del tiempo gracias a su avanzado arsenal para la época, ya que fue desarrollado a principios del siglo pasado, más específicamente para 1906. Tan grande fue el cambio que produjo en su momento este navío, que los barcos que lo precedieron son llamados pre-dreadnoughst, y los que lo siguieron, super-dreadnoughts.
Fue tan importante históricamente este barco, que a partir de su lanzamiento al océano, como sexto buque de la Marina Real Británica en llevar ese nombre, se produjo una verdadera revolución en el mercado armamentista marino de las principales potencias del mundo en ese momento, y que posteriormente marcaría esos tiempos como los antecesores a los de las Guerras Mundiales.
En la actualidad, los acorazados con baterías principales de un solo calibre son llamados de la misma forma, Dreadnoughts, en una especie de homenaje a este iniciador en muchos aspectos de una nueva forma de ataque marino. Es que las ofensivas militares llevadas a cabo con este barco vencieron en su tiempo a navíos que durante décadas habían sido creídos invencibles.
Cuando fue inaugurado, podía alcanzar hasta 21 nudos de velocidad, lo que lo convertía en el acorazados más rápido del mundo. Esto era en gran parte gracias a ser impulsado por medio de turbinas a vapor, donde también fue pionero dentro de barcos de guerra. En resumen, se trata de uno de los navíos más fuertes históricamente hablando, y que realmente ha dejado huella en los mares por los que ha pasado.