10 razones para reservar un crucero de lujo

Lo sabemos, no todo el mundo sabe que un crucero de lujo no es "cualquier crucero". Ni lo es el trato, los barcos, los destinos, .... A menudo incluso la prensa a veces confunde conceptos y estilos, acaparando el exclusivo mundo del crucero de lujo con el "popular" mundo de los cruceros... digamos cruceros sin más para diferenciarlos. Prensa no especializada, por supuesto, como pasaba el otro día en un artículo de eleconomista sobre cruceros y que bien nos apuntaba nuestro amigo Josep Piqué en el twitter.

Pero polémicas al margen, vamos a aportar un poco de luz sobre algo tan mediáticamente confundido como es el mundo de los cruceros de lujo. Y, que mejor forma, que en lugar de volver a explicar por activa y por pasiva qué diferencias hay entre un crucero de lujo y un crucero "normal", que mejor forma decía que dando 10 razones para embarcarse en tus próximas vacaciones en un crucero de lujo (pero de lujo de verdad).

1. El barco, fundamental y lo primero que probablemente vas a notar cuando subas a bordo. Si se trata de un crucero tipo Seabourn o Seadream, obviamente estamos en un gran yate más que en un crucero. O quizá en un crucero pequeñito. Pero en cruceros de mayor tamaño y que pueden considerarse como cruceros de lujo, los detalles pueden ser más "sutiles". Por ejemplo, en Holland America (**) algunas de sus joyas están construidas sobre la clase Vista. Hablamos de cruceros como el MS Noordam,el MS Oosterdam o el Eurodam. Y no sólo Holland America, el mítico Queen Victoria también está construido con los mismos planos. Clase Vista, que comparte con un crucero "popular", el Costa Luminosa, y que obviamente no estaría incluido en la primera división de los cruceros (los cruceros de lujo). Que que los diferencia? Casi 300 pasajeros menos que permite diseñar camarotes más amplios, mejorar el ratio tripulante/pasajero (mejor atención al pasajero), etc etc... 
2. Siguiendo con el crucero, los camarotes son otra de las grandes diferencias. En  Crystal Cruises por ejemplo, todos los camarotes son suites. El camarote estándar, para que os hagáis una idea, un camarote exterior con balcón, tiene las mismas dimensiones que las suites de NCL. Y olvidaros de los camarotes interiores. El camarote más básico en Crystal Cruises es un Exterior Lujo con ventana, con además unos ventanales enormes con muy buenas vistas al Promenade, una de las zonas de paseo más bonitas que hemos visto nunca en un crucero.
3. La tripulación, mayor ratio de tripulante por pasajero implica que habrá un mayor número de tripulantes disponibles para cualquier tipo de problema que surja, o directamente para evitar que surja ningún problema y el crucero sea simplemente perfecto.
4. El trato. Desde la recepción en el camarote, con frutas frescas y tu asistente de camarote ofreciéndote su ayuda para cualquier duda hasta rincones como la piscina, donde cada cierto tiempo tendremos a un miembro de la tripulación ofreciéndonos un refresco (todo incluido por supuesto) o simplemente una toallita "helada" para refrescarnos. Un refresco para acompañar la comida? Incluso en el buffet, antes de que te hayas sentado con tu bandeja ya te habrán tomado nota y habrán dejado tu bebida en tu mesa. Detallazos así no los encuentras en cualquier parte y marcan diferencia.
5. Las aglomeraciones. Olvídate de las colas o de grandes aglomeraciones a bordo. Es lo primero que sorprende a bordo de un crucero de lujo: en ningún momento tienes la sensación de compartir salón con cientos de personas.
6. El ambiente a bordo. Buscas fiesta? Bueno, quizá este no es el mejor tipo de crucero para ti. En un crucero de lujo vas a encontrar conciertos de piano, jazz, música clásica, teatro, cine, ...  si buscas algo más marchoso, fiesta caribeña, la conga... te recomiendo un Pullmantur, por ejemplo. Cruceros divertidísimos y donde vas a tener toda la fiesta que quieras. Ahora bien, si buscas relax, estar tranquilo en tus hamacas sin muchas estridencias, griterío de niños saltando a tu alrededor... justamente evita esos cruceros y embárcate en un crucero de lujo.
7. La gastronomía. Sencillamente espectacular. No hay nada como cenar cada noche en un restaurante de 5 tenedores... bueno, si que lo hay, comer y cenar en un restaurante de lujo con unas buenas vistas.
8. Los destinos. Estás cansado de lo "habitual"? Barcelona, Monaco, Roma son destinos preciosos y hay que visitar alguna vez en un crucero. Ahora bien, viajar en un crucero de lujo en la mayoría de ocasiones supone viajar en un crucero de tamaño pequeño o mediano. Cruceros o "yates" que pueden atracar en destinos mucho más exóticos, mucho más auténticos, como pequeñas islas paradisíacas o pueblos totalmente típicos del país en el que desembarcamos.
9. Las noches en destino, algo que mucha gente nos pregunta y que si os habéis embarcado en más de una ocasión habréis echado (o no) de menos. Estar atracado en puerto es tremendamente caro para la naviera, y por ende para el crucerista. Por eso los cruceros suelen llegar a las 8 o 9 de la mañana y sueltan amarras entre las 4 y las 6 de la tarde. En un crucero de lujo es muy habitual que en algunos destinos se permanezca en puerto hasta algo más tarde, incluso hasta las 2 o 3 de la mañana en el caso de determinados puertos. Ejemplo, una de las cosas más bonitas fué poder cenar el año pasado en Saint Tropez, no sólo quedarnos con la visita turística de la mañana.
10. Las excursiones, tan auténticas como tu mismo quieras o pueda permitirse tu bolsillo. Un paseo en helicóptero, una vueltecita a Santorini en un velero, una excursión por mónaco en Ferrari, ... No te pierdas nuestro artículo: Excursiones exclusivas en los cruceros.

En realidad hay muchas más razones, pero he querido dejaros mis 10 principales basadas en mi opinión personal. Si queréis compartir la vuestra ViajarenCruceros está a vuestra disposición :-).

Para terminar, estos días he visto algunas conversaciones por las redes sociales sobre si merecía o no la pena la inversión que supone embarcarnos en un crucero de lujo. Estamos hablando de 5.000 o 6.000 euros por persona en algunas navieras frente a los alrededor de 1.000 en una naviera "estándar", como Royal, NCL o MSC. Simplemente añadiré una cosa, de lo único que me arrepiento del crucero del pasado 2010 en el Crystal Serenity es de no haber embarcado en Estambul y estar 15 días a bordo en lugar de una única semana.

(**) Nota: Holland sería un crucero premium más que un crucero de lujo, lujo. En unos días entraremos en este tema, y seguramente lo hagamos navegando desde un Holland America :-).