No es un destino muy conocido, pero la ciudad de Gdansk vale la pena ser visitada, sobretodo si se realiza alguno de los muchos cruceros que pasan por el mar Báltico. Esta ciudad polaca situada en la costa norte de Polonia fue casi destruida por completo durante la segunda Guerra Mundial, pero hoy en día reluce por su esplendor.
Gdansk es la sexta ciudad más grande e importante de Polonia, tiene aproximadamente medio millón de habitante y uno de esos lugares más importantes es precisamente su astillero, lugar donde se creó el sindicato de la solidaridad.
Aunque fue devastada durante la ocupación nazi y la posterior Guerra Mundial, la ciudad poco a poco se fue reconstruyendo, gracias a la ayuda de diferentes arquitectos y artistas de diferentes nacionalizadas que reflejaron en las calles del centro de la ciudad su arte.
Hoy en día la ciudad es muy atractiva para la visita del turista. Sus principales edificios, iglesias y monumentos han sido reconstruidos y restaurados por completo. Por esta ciudad pasa el río Moldava y aquí se encuentra también la grúa medieval más gran de toda Europa.
Uno de los lugares más bellos es el centro histórico de la ciudad, sus callejuelas estrechas, empedradas y peatonales hacen que pasemos un buen rato disfruta de un paseo.
Ya sabéis, si en breve o en el futuro hacéis un crucero por el norte de Europa y una de vuestras escalas es la ciudad de Gdansk no olvidaros de la cámara ya que de buen seguro tomareis muchísimas fotografías.
