MS Oosterdam, un crucero de lujo

Despues de la visita de ayer al MS Oosterdam nos han quedado algunas cosas claras. La principal de ellas es que el Oosterdam, aunque comparte diseño exterior con todos los cruceros de la clase Vista, en realidad no tienen nada que ver entre ellos por diferentes aspectos, como distribución interior, trato o incluso por el tipo de público.

En el Oosterdam, por ejemplo, podemos encontrarnos con la curiosidad de que comparte clase con el Costa Luminosa, sin embargo en el Oosterdam tiene una capacidad máxima de 1916 pasajeros frente a los 2.260 del Costa. Es decir, en el Oosterdam vamos a encontrar camarotes más grandes, zonas de ocio mas amplias, etc

Siguiendo el tema de la Clase Vista, construida por encargo de Carnival, entre los que se incluyen los buques hermanos de los que hablábamos ayer o cruceros como el Costa Luminosa, el Costa Deliziosa o el precioso Queen Elizabeth, fué estrenada por el MS Zuiderdam, el primero de su clase.

La clase Vista viene equipada con propulsores Azipod, de los que ya os hemos hablado alguna vez, y son cruceros Panamax. Esto quiere decir que son capaces de navegar por canales como el de Panama y hacer rutas diferentes a las marítimas, a medio caballo entre un crucero por mar abierto y uno por un rio, que son realmente bellas y relajantes.

Además la clase Vista viene de serie con un 85% de camarotes exteriores y un 65% de habitaciones con balcon (ya sabeis que estos últimos son mi debilidad, no suelo embarcarme sin un camarote con balcon desde donde poder respirar la brisa del mar en la tranquilidad de tu habitación... manias que tiene uno).

En el caso del Oosterdam, la decoración es algo más discreta que en otros cruceros en los que se hace gala de mayor ostentación. Esto sin embargo aporta un ambiente muy cálido al crucero. Además otra característica de la clase Vista es el uso intensivo del cristal, lo que proporciona la luz suficiente a todo el crucero con independencia de los tonos elegidos en sus interiores.

Por último hay que destacar que el Oosterdam es un crucero en el que se busca el máximo confort y relajación del pasajero. En ningún momento vimos niños por la piscina ni corriendo por los pasillos, y es que la política de la naviera en este buque la hace perfecta para quienes se estresen con niños a la vista. No tienen la entrada a bordo vetada, evidentemente, pero por un lado el precio del pasaje es el mismo que el de un adulto y, por el otro, tienen zonas en las que podemos dejarlos hasta las 10 de la noche, sin coste adicional, en las que tienen actividades y zonas de juego exclusivas para ellos.

Además en ningún momento vas a escuchar llamadas por megafonia ni músicas estridentes por ninguna parte del barco... todo es relax en el MS Oosterdam.

No me puedo dejar el tema gastronómico, ya que la comida de la que disfrutamos ayer fué una de las mejores que he probado a bordo de un crucero sólo superada por la maestría de los chefs de Pullmantur.

En definitiva, un crucero en el que se respira ambien relajado por todas partes, en el que el pasajero es tratado con el máximo mimo y esmero que podrías esperar en todo un crucero de lujo y en el que la única pega o inconveniente que hemos podido encontrar para el pasajero hispano hablante es que el idioma de a bordo es el ingles (aunque hay asistencia en castellano).