El lujo se instaló ayer en el puerto de cruceros de la ciudad condal, hasta dos cruceros estuvieron en el muelle de crucero.
Estos serán algunos de los pocos buques de lujo que pasarán por Barcelona durante la temporada, no porque no gusten de realizar escalas en la ciudad condal, sino por el hecho de que son pocas las navieras Premium que existen en el mundo. De hecho, de los más de dos millones de cruceristas que se embarcarán esta temporada en el muelle de cruceros de Barcelona, sólo unos pocos miles lo harán en cruceros de lujo. Y es que el lujo de estas embarcaciones no se mide sólo por la cantidad de oro que puede verse en su interior, sino sobre todo por la calidad del servicio.
Lo que prima en este tipo de barcos no es tanto la variedad de instalaciones sino el máximo confort. Los menos de mil pasajeros que suelen viajar en este tipo de barcos gozan de espacios mucho más amplios, de camarotes espaciosos y más confortables, pueden disfrutar de una tumbona frente a la piscina y tomar el sol sin tener que ir a primera hora de la mañana a coger un sitio.
Este tipo de cruceros ha aguantado perfectamente la crisis y ahora parece que va apostar fuertemente por Barcelona, incluso con pernoctaciones en el muelle, que resulta un derroche económico importante. Hace tan sólo unos días, el lujoso Silversea Spirit estuvo dos días enteros en Barcelona.