Los amaneceres y atardeceres a bordo de un cruceros siempre son especiales.
No hay nada mas relajante que quedarse contemplando la puesta de sol desde la cubierta, o ver la salida del sol desde el balcón de tu camarote. Yo lo he hecho decenas de veces y siempre me quedo hipnotizada por los colores, el olor del mar, la brisa marina cuando el barco está navegando...Es como un momento de meditación que me hace recordar la belleza y grandeza de este mundo...Y lo mucho que me gustan los cruceros!!
Y después de esos momentos, no hay nada mejor que saber que con solo subir una escaleras tendré a mi alcance un maravilloso buffet para el desayuno, o que podré elegir entre las opciones de restauración, la que más me apetezca esa noche.
Las fotografías que podeis ver, fueron captadas por el fotógrafo Owen Humphreys, cuando el crucero MSC Magnifica navegaba por el río Tyne, un río corto costero de la vertiente del mar del Norte del Reino Unido que discurre por el noreste de Inglaterra.
Fuente: dailymail.co.uk